Cementerio de Sant Gervasi

Tema: Cultural

A partir de mediados del siglo XIX, la demografía en Sant Gervasi de Cassoles inició un fuerte crecimiento. Hasta el momento, la población era de unos 370 habitantes, fechado en 1833, pero barceloneses de clases burguesas empezaron a urbanizar la zona ya construir casas de veraneo y de recreo. En 1860 se construyó el tren de Sarrià, que unía a la población con Barcelona, ​​ya medida que las comunicaciones iban mejorando, muchos barceloneses se instalaban para vivir todo el año. El entorno y el aire que se respiraba era más limpio y sano que el de la industrializada y apretada ciudad de Barcelona, ​​que todavía quedaba amurallada bajo condiciones poco higiénicas. En poco más de 50 años dejó de ser un pequeño pueblo de campesinos y se convirtió en una zona residencial con antiguas casas solariegas, villas de veraneo, casas menestrales, conventos religiosos, artesanos y pequeños rentistas, dando el carácter que todavía hoy tiene el barrio de Sant Gervasi. En 1861 la población era de 2.512 habitantes, en 1878 de 5.148 habitantes y en 1893 ya eran 9.174 habitantes.

El cementerio de Sant Gervasi no fue creado hasta el año 1853, cuando todavía era una villa independiente (Sant Gervasi de Cassoles no se anexionó a Barcelona hasta 1897). Éste fue creado porque el cementerio parroquial ya no podía cubrir más las defunciones de sus habitantes y, por razones principalmente higiénicas, se clausuró. Es por esta razón que se creó un nuevo recinto funerario en las afueras del pueblo, justo en la vertiente del monte Collserola.

El cementerio de Sant Gervasi está dividido en dos partes por una gran escalinata que va desde la entrada principal hasta la capilla, ubicada en la parte más alta. Esta escalinata es uno de los elementos más característicos del cementerio, que representa las 14 estaciones de Viacrucis con unos bonitos mosaicos. A ambos lados se distribuyen bloques de nichos y numerosas tumbas y panteones monumentales que recuerdan las torres que se edificaron en aquella época en la zona, y que refleja la vida de las personas que están enterradas, muchas de ellas pertenecientes a la burguesía y en la aristocracia del momento.

Seguidamente, veremos algunas de las sepulturas más relevantes del cementerio y conoceremos a algunos de los personajes ilustres de Barcelona que decidieron ser enterrados aquí, donde la opulencia y el gusto por el arte ha dejado una gran huella.

1. Panteón Bosch Figueroa_ panteón 1 St. Gervasi P.

El panteón de las familias Bosch y Figueroa fue realizado en 1883 por encargo de Rafael Bosch i Figueroa, quien fue teniente alcalde del antiguo municipio de Sarrià.

Rafael Bosch era hijo de Rafael Bosch y Carbonell, quien también está enterrado en ese panteón. Éste era originario de una familia de industriales e indianos del algodón que se enriquecieron en Cuba.

Rafael Bosch también era conocido por ser el hermano de Clotilde Bosch, la cual fue pintora y esposa de Ildefons Cerdà, urbanista creador del Eixample de Barcelona.

Rafael Bosch Carbonell murió en 1905 y fue enterrado aquí, donde descansaban sus padres y su esposa Dolors Figueroa, quien murió pocos años antes, y todos sus descendientes.

Este panteón de estilo neoclásico sorprende por sus grandes dimensiones, con un amplio acceso flanqueado por dos pebeteros y con dos bancos de piedra donde sentarse y recordar la memoria de los difuntos. Los tres escalones llevan a la tumba, que está cubierta por un templo de dos columnas y donde destacan las paredes interiores pintadas de color azul. En el frontón de forja destaca un ángel, y justo detrás del nombre de las familias fundadoras Bosch i Figueroa.

 

 

 

2. Eduard Grenzner i Fellner_panteón 17 St. Gervasi P.

Eduard Grenzner fue un reconocido pintor dentro de los movimientos del romanticismo, el realismo y el nazarenismo.

Nacido en Barcelona en 1833 y de familia acomodada, su padre era un representante de vidrio y porcelana originario de la antigua Bohemia alemana, estudió en la Real Academia de Bellas Artes. Sus obras tenían una buena aceptación entre la burguesía catalana, lo que le permitió viajar por todo el mundo, donde enriqueció su estilo artístico. En Cuba es donde conoció a su esposa Manuela Gronher.

Grenzner destacó sobre todo por el retrato y por ser sobre todo un pintor realista. Realizó un gran número de retratos por encargo a particulares y también para muchos miembros de su familia, participando en numerosas exposiciones junto a otros artistas.

Murió en 1908 y fue enterrado en este panteón adquirido por él mismo en 1881 para enterrar a su mujer.

 

 

 

3. Rudolf Grewe_panteón 2 St. Gervasi P.

En este panteón, propiedad de la familia Esteva, se encuentra enterrado un especialista en gastronomía, gran entendido de la cocina catalana y escritor de diferentes libros de alimentación, Rudolf Grewe.

Rudolf Grewe fue un filósofo, matemático e historiador que con su indagación ha ayudado a mantener viva la memoria de la cocina catalana que tanto gusta en todo el mundo por su rica variedad y por ser una cocina muy saludable.

En 1979 Rudolf Grewe publicó el Libro de Sent Soví, un recetario medieval escrito en catalán, que data de 1324 y de autor anónimo, mediante la reconstrucción de dos manuscritos antiguos hallados en Valencia y en Barcelona.

Gracias a su trabajo, actualmente la Universidad de Barcelona dispone de un gran fondo de libros de cocina, que consta de 129 libros antiguos, desde el siglo XVI a 1820, y casi 1000 libros modernos que entregó como donación.

Actualmente, podemos decir que su obra y su gusto por la cocina ha tenido continuidad dentro de su familia gracias a su sobrina, Rosa Maria Esteva Grewe, quien es la fundadora, junto con su hijo, del reconocido grupo de restaurantes barceloneses Grupo Tragaluz.

Rudolf Grewe murió en 1994 y fue enterrado en el panteón familiar de estilo neoclásico que fue construido en 1888.

 

 

 

4. Josep Rosés i Padrosa_panteón 16 St. Gervasi P.

En este panteón reposa Josep Rosés, quien fue alcalde del antiguo municipio de Sant Gervasi de Cassoles. Su padre, Pau Rosés y Calvet, el primer difunto enterrado aquí, fue un importante comerciante de paja, hasta el punto de que abastecía al ejército de Isabel II. Según dicen, rechazó el título nobiliario que quería atribuirle como agradecimiento. También se le recuerda por vivir en la masía Can Rosés, conocida como Can Rosés de la Palla, ubicada en la Calle Muntaner con Travessera de Gràcia. Justo enfrente tenía la Casa Llorach de Puig y Cadafalch. Posteriormente se derribó y se construyó una casa neoclásica donde vivió Josep Rosés, también derribada en los años 60.

A Josep Rosés se le recuerda, entre otras cosas, por inaugurar el Velódromo de la Bonanova en 1893 (ubicado antiguamente por encima de los terrenos del futuro Turó Parc), donde se disputaban varias carreras ciclistas, algunas de internacionales. Al poco tiempo fue cayendo en desuso, hasta que a partir de 1899 este velódromo se convirtió en el primer campo donde jugó el Fútbol Club Barcelona, ​​que lo alquiló durante 9 meses para disputar sus partidos como local.

Josep Rosés murió en 1914 y fue enterrado en el panteón de su propiedad, construido en 1881, donde reposan también sus descendientes.

 

 

 

5. Josep Costa i Faura_panteón 4 St. Gervasi P.

En el panteón de la familia Costa está enterrado Josep Costa i Faura, quien fue jugador del Fútbol Club Barcelona entre 1912 y 1920.

Fue un destacado centrocampista y defensor, recordado sobre todo por el trío que formaba en defensa junto a Lluís Bru y Eduard Reguera. Los tres se hicieron muy populares.

Fue campeón de Cataluña en cuatro ocasiones (1913, 1916, 1919 y 1920), una de España (1920) y jugó con la selección catalana tres veces.

Josep Costa murió en Madrid en 1968 y fue trasladado a Barcelona para ser enterrado en el panteón familiar. Este panteón construido en 1910 sigue la línea neoclásica habitual de las sepulturas de alrededor, ya que a menudo se copiaban los estilos.

 

 

 

 

6. Família Echevarne_panteón 2 St. Sever

El panteón de la familia Echevarne es propiedad actual de Fernando Echevarne Florence, propietario de los laboratorios de análisis clínicos que fundó en 1958 en Barcelona. Muchos barceloneses seguramente habrán pasado en algún momento por sus laboratorios.

Anteriormente, este panteón había tenido a otros propietarios. En primer lugar, Enric Ferrer i Portals, un rico boticario barcelonés que había sido vicepresidente del Club de Tenis Barcino y del posterior Real Club de Tenis, presidente de la Federación Catalana de Tenis y del Club Marítimo.

Posteriormente a Enric Ferrer, quien fue titular del panteón fue Joan Ignasi Pons Casademunt, descendiente de una familia de industriales originaria de Manresa, propietarios de la Colonia Pons, la cual era la más importante de Cataluña por su arquitectura y urbanismo. Además, eran también fundadores de la Caja de Manresa y fueron quienes impulsaron principalmente la línea de ferrocarril de Manresa a Berga. La familia Pons sigue siendo muy acomodada, porque en la actualidad son propietarios de extensos terrenos de la ciudad de Barcelona.

El panteón de la familia Echevarne destaca principalmente por el ángel de mármol que preside la sepultura y que arroja flores sobre la sepultura en memoria del difunto.

 

 

 

7. Josep Bosch i Grau_panteón 3 St. Sever

Este panteón fue encargado en 1889 por Josep Bosch, quien es recordado por ser el fundador del mundialmente conocido licor “Anís del Mono”, junto con su hermano Vicenç Bosch.

Los hermanos Bosch fundaron la fábrica “José Bosch y Hermano” en Badalona en 1868. Gracias a los atractivos diseños de las etiquetas de sus licores, siendo pioneros de la publicidad, se hicieron muchos famosos y el anisado que hacían, llamado “Anisado Refinado Vicente Bosch” recibió popularmente el nombre de “Anís del Mono”, ya que en la etiqueta aparecía un mono. Se cree que el mono hacía referencia a las teorías evolucionistas de Darwin, para mostrar que su marca era la más evolucionada.

Josep Bosch murió de enfermedad en 1897 y fue enterrado en este panteón. Su hermano adquirió toda su parte para seguir con el negocio tan fructífero. Éste también fue una figura muy popular en Badalona y se convirtió en teniente alcalde de la ciudad.

El panteón destaca por la participación del escultor Josep Campeny en el busto de Josep Bosch y en el magnífico ángel que apunta al cielo. La escultura destaca por su trabajo en los pliegues de las ropas y en la expresividad, pero también en la originalidad de la posición, pensada para que el visitante se sienta interpelado por la mirada del ángel que, mientras ofrece la corona de flores al difunto, nos indica que éste está en el cielo. Josep Campeny fue un reconocido artista igualadino que participó en diferentes exposiciones en toda Europa y que ganó varias medallas de oro. En Barcelona tiene algunas fuentes muy populares como la Font de la Granota, frente al Palau Robert, la Font del Noi dels càntirs, en la Pl. Universidad, o la Fuente del Trincha, ubicada en la Ronda Universidad-Pelayo. El panteón fue realizado por el arquitecto Ubald Iranzo, arquitecto modernista que fue el director de la sección de urbanismo de Barcelona de 1900 hasta 1921, trabajó en el Ayuntamiento de Berga y destacó, entre otros trabajos, por las obras en la Casa de la Villa de San Sadurní de Anoia.

 

 

 

8. Tomàs Rosés Ibbotson_panteón 1 St. Josep

Tomàs Rosés, nacido en Liverpool en 1883, era el primer hijo de una familia de industriales del textil de larga tradición (1837) y que destacaron por convertir la fábrica en una importante colonia industrial en Cornellà de Llobregat con el nombre de "Rosés y Compañía".

 

Ya de joven, Tomàs Rosés viajó a Inglaterra para trabajar y aprender de las nuevas maquinarias que trabajaban el algodón. Llegó a dirigir una gran hilatura. Al retornó, dirigió la empresa familiar junto a su padre hasta que éste murió, y él compró todas las acciones a sus hermanos. En 1921 la industria era bautizada con el nombre de “Algodonera Tomàs Rosés S.A.”. Durante muchos años, el textil catalán tuvo gran fama, y ​​los industriales tuvieron mucho éxito. Sin embargo, la algodonera cerró el año 1958.

Paralelamente, Tomàs Rosés expandió el negocio familiar al sector financiero, y en 1930 constituyó la Banca Rosés, y él era el gerente. Posteriormente, esta banca fue comprada en el año 1957 por un grupo de empresarios y se convirtió en el Banco Condal, que se expandió por todo el estado. Finalmente, en 1984 cerró, después de que fuera comprada 10 años antes por José María Ruiz Mateos, popular sobre todo en el mundo del fútbol, ​​y unida al grupo de bancos Rumasa, que tuvieron que cerrar por irregularidades.

Si por algo es conocido Tomàs Rosés fue por su actividad deportiva. En 1929 se convirtió en presidente del Fútbol Club Barcelona y sólo tres meses después el club se proclamó campeón de la primera edición de la Liga española. Sin embargo, al año siguiente tuvo que dejar el cargo según los estatus del club y después de varias tensiones con los jugadores de la plantilla.

Tomàs Rosés murió en 1948 y fue enterrado en el monumental panteón familiar que había adquirido su padre en 1901. Este panteón fue proyectado por Leandre Albareda, un gran arquitecto de estilo ecléctico y de inspiración modernista contemporáneo a Antoni Gaudí, con quien estudió en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona. Leandre Albareda llegó a ser el arquitecto municipal de Barcelona, ​​y una de sus principales obras fue el diseño y construcción del monumental Cementerio de Montjuïc, y de algunos de los panteones más relevantes de este recinto funerario. En este panteón destaca sobre todo una escultura de un gran ángel obra de Josep Reynés, hecho de mármol que señala con actitud seria un libro. Sabemos que es la Biblia porque se puede leer en latín un versículo de la primera carta a los Corintios de San Pablo donde hace referencia a la transformación de los cuerpos en la vida eterna “Porque este cuerpo corruptible debe revestirse de lo incorruptible, y este cuerpo mortal debe revestirse de inmortalidad”. El ángel tiene las alas desplegadas, como si estuviera a punto de emprender el vuelo. Cabe destacar el trabajo de forja realizado por la fundición Masriera i Campins, la más prestigiosa del momento. La simbología de la adormidera que se encuentra en la barandilla que rodea el panteón, la cual es una de las simbologías funerarias más recurrentes de los cementerios. De la adormidera se le puede extraer opio, y éste como droga muy fuerte que te hace dormir, se relaciona con el sueño eterno, con la muerte.

 

 

 

 

8 Bis- Família Craywinckel_ panteón 1, Sta. Cecília

Los orígenes de la familia Craywinckel se remontan a la nobleza belga, que estaba al servicio de la monarquía hispánica durante el reinado de Felipe V y ocupaban cargos destacados en las colonias americanas, donde poseían grandes extensiones de tierras. En el siglo XVIII se establecieron en Barcelona y su residencia la tenían donde actualmente se encuentran los Jardines de la Tamarita.

La familia Craywinckel eran terratenientes de San Gervasi y da nombre a una calle que une el Paseo de Sant Gervasi con la Avenida de la República Argentina. En 1870 Juan de Craywinckel inició la urbanización de los terrenos de su propiedad, los más extensos de la zona y donde vivía la familia, concretamente en la casa conocida como el Fraile Negro (actual Plaza Kennedy).

El panteón fue construido en 1888 por encargo de Manuel de Craywinckel, terrateniente que en 1889 también impulsó la urbanización de la zona bajo el nombre de Mercedes, en honor a su esposa Mercedes Hurtado de Mendoza. La nueva sepultura familiar de estilo neoclásico acogió los restos de familiares procedentes del mismo cementerio, entre ellos los de su esposa, y en 1916 inhumaron los de Manuel de Craywinckel.

craywinckel

 

9. Família Buscarons_panteón 5 Sta Cecília

Este monumental panteón es propiedad de la familia Buscarons, de la que destacó Francesc Buscarons Villamide por su labor de químico en la Universidad de Barcelona, ​​y por Francesc Buscarons Úbeda, quien fue rector de la misma universidad en 1951.

Ambos, junto a otros miembros de su familia, están enterrados en este magnífico panteón neogótico, un estilo muy común en el arte funerario. Las formas góticas conferían prestigio y se asociaban a la religiosidad bien fundamentada. Además, a lo largo del siglo XIX en Europa predominaba el romanticismo, aplicado también en la arquitectura y estrechamente vinculado con el arte neogótico, como se demuestra con muchas de las catedrales europeas y también en los cementerios. La parte alta compuesta de pináculos tienen un gran parecido a los de la Catedral de Barcelona. Se desconoce la autoría.

 

 

 

10. Familia Rodríguez_panteón 5 St. Sever

Este panteón lo hizo construir Rafael Rodríguez Méndez, destacado médico andaluz que se instaló en Barcelona después de obtener la cátedra de higiene en la UB, de la que fue su párroco desde 1902 a 1905.

Rafael Rodríguez tuvo también una faceta política activa, vinculado al Partido Radical de Alejandro Lerroux, fue diputado por Barcelona.

Su hijo, Ángel Rodríguez Ruiz es recordado por ser el fundador y primer presidente del Real Club Deportivo Español, club que nació en 1900 con el nombre de Club Español de Foot-ball y que en 1910 se cambiaría por el nombre actual, cuando el Rey Alfonso XIII le concedió el título de Real, así como el uso de la corona que todavía puede verse en su escudo. Este nombre responde a que era un equipo formado únicamente por jugadores de España, para diferenciarse de los otros equipos formados mayoritariamente por jugadores ingleses. Ángel Rodríguez por aquel entonces era estudiante de ingeniería y junto con dos amigos de la universidad, empezaron la historia de un club centenario. En su honor, se le dedicó una plaza de Barcelona justo donde había estado el Estadio de Sarrià, en el que el Espanyol jugó desde 1923 a 1997.

Ambos fueron enterrados en el panteón familiar construido en 1900, Rafael Rodríguez en 1919 y Ángel Rodríguez en 1959.

 

 

 

11. Enric Cardona i Panella_panteón 6 St Esteve

Enric Cardona es recordado por ser presidente del Fútbol Club Barcelona, ​​el decimoquinto desde la fundación del club y escogido por la asamblea de socios. Tuvo una presidencia muy corta pero intensa y marcada por la trayectoria del equipo y del contexto político.

El 29 de julio de 1923 cogió las rentas del club, sucediendo a Joan Gamper, fundador y primer presidente del Barça, después de su cuarta etapa en la presidencia. La temporada tuvo un buen inicio, ya que el Barça logró el campeonato de Catalunya con autoridad, ganó los diez partidos que disputó. Sin embargo, pese a la euforia inicial, la derrota por 6 a 1 contra el Real Unión de Irún y la consecuente eliminación del campeonato de España, provocó un enfrentamiento entre la directiva y los jugadores. Esto llevó a la dimisión del presidente Cardona el día 1 de junio de 1924. Joan Gamper fue quien aceptó la presidencia del club por quinta y última vez.

A Enric Cardona también le tocó vivir un contexto político muy complicado. Pocos meses después de proclamarse presidente, empezó la dictadura del General Primo de Rivera. El Barça, como defensor del catalanismo, se convirtió en un club perseguido, dentro y fuera del terreno de juego. Ejemplo de ello fue la tradicional ofrenda floral que hace cada 11 de septiembre en el monumento de Rafael de Casanova, cuando la policía reprimió el acto e hirieron a los manifestantes, entre ellos Cardona y otros directivos del club.

Enric Cardona murió en 1966 y fue enterrado en el panteón familiar, que había sido traspasado a su nombre en 1943.

 

 

 

12. Josep Bertran i Musitu_panteón 7 St Esteve

Josep Bertran i Musitu, nacido en 1875, era hijo de una familia aristocrática barcelonesa. Su padre, Felip Bertran, era un reconocido jurista y político conservador, y su abuelo, Josep Bertran Ros había sido alcalde de Barcelona y rector de la Universidad de Barcelona. Josep Bertran i Musitu se casó con Maria Cristina Güell, hija del Conde Güell, una de las casas familiares más influyentes de todo el estado durante los siglos XIX y XX. Josep Bertran construía así un linaje familiar aún más potente.

Josep Bertran, siguiendo la misma línea familiar, se convirtió en abogado y político, siendo uno de los fundadores de la Lliga Regionalista y uno de los colaboradores más fieles de Francesc Cambó, presidente de este partido conservador.

A Josep Bertran le tocó vivir un contexto marcado por las tensiones sociales y políticas que acontecieron en dictaduras militares y graves conflictos bélicos con eco internacional. Durante los años previos a la dictadura del General Primo de Rivera, en Barcelona se vivía un gran clima de violencia en la ciudad entre clases sociales, patrones y obreros. Josep Bertran fue uno de los organizadores del pistolerismo, una serie de actos violentos promovidos por la patronal catalana para luchar contra el movimiento obrero. Posteriormente, durante la dictadura del general Primo de Rivera, se retiró temporalmente de la política y de forma definitiva cuando se proclamó la Segunda República Española.

En 1936, cuando estalló la Guerra Civil española, emigró a Francia y fue a partir de ese año cuando su figura cogió un gran renombre. El General Francisco Franco, líder del golpe de estado contra el gobierno de la Segunda República Española, le destinó a Berlín, donde los servicios secretos alemanes le entrenaron en técnicas de espionaje. A su regreso, Josep Bertran fue el encargado de organizar un servicio de información que fue la base del “Servicio de Información Político-Militar” de las fuerzas del general Franco, y junto con el general Mola creó el Servicio de Información de la Frontera Norte de España”, un organismo de inteligencia y espionaje que desempeñó un papel muy importante en el curso de la Guerra Civil española.

Una vez terminada la Guerra Civil española, volvió a Barcelona y por su valioso papel en el bando franquista, siendo probablemente el catalán más influyente en la guerra, fue designado, por las autoridades franquistas, presidente de grandes empresas como la cementera Asland, encargada de la reconstrucción de infraestructura y el levantamiento de pantanos en todo el estado. Se convirtió en una de las personas más ricas e influyentes de la ciudad.

Josep Bertran murió en 1958, tras sufrir una caída en su domicilio del Paseo de Gracia, y fue enterrado en el magnífico panteón familiar construido por el reconocido escultor Frederic Marès, siendo una de las obras funerarias más valiosas del cementerio. Frederic Marès, quien fue también un gran coleccionista de arte y un docente y director destacado de la Escuela de Bellas Artes y de la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de Barcelona, ​​obtuvo el Premio Creu de Sant Jordi por su legado cultural, sobre todo en la escultura. Frederic Marès en este panteón realizado en 1927 tuvo la innovadora idea de hacer un conjunto funerario de forma semicircular que son como dos brazos que acogen a los familiares del difunto, y un banco para poder descansar y estar con los restos. En el relieve central podemos observar la representación de Cristo muerto en una posición extraña, está desnudo y sentado sin que nadie le sostenga. Está acompañado de dos ángeles en relieve y policromados en dorado.

 

 

 

13. Joan Maragall_panteón 8

El diseño del panteón de la familia Maragall corrió a cargo de Josep Pijoan, amigo íntimo del poeta Joan Maragall, arquitecto y escritor. Colaboró ​​Francesc de Paula i Nebot, arquitecto noucentista y quien firma los planos en 1914, y el maestro de obras Joan Masdeu. El panteón es cuadrangular y tiene un banco donde sentarse alrededor de la sepultura. De gran sobriedad, sólo aparece el nombre del difunto y una anecdótica decoración con unos frisos en la parte superior con cenefas, una cruz y algún elemento animal. Destaca la presencia de dos pavos reales simétricos a ambos lados de la cruz, símbolo persa que expresa la dualidad de la vida, pero adaptado por occidente y el cristianismo como símbolo de inmortalidad y del alma incorruptible.

Joan Maragall fue una de las figuras primordiales de la poesía catalana modernista de finales del siglo XIX y principios del XX. La poesía de Maragall es la vertiente más conocida, pero también tiene un gran legado en prosa, con más de 450 textos, que le situaron dentro de la intelectualidad culta de la Barcelona de la Renaixença.

Hijo de la burguesía catalana, Joan Maragall renunció a la industria textil familiar para dedicarse a su pasión, la literatura. Nunca renunció a sus orígenes, pero despreciaba el conservadurismo y la falta de refinamiento de su familia típica burguesa. Para reafirmar su opción de vida, empezó a escribir en castellano en el Diario de Barcelona y se casó con Clara Noble, de ascendencia no catalana, era hija de un comerciante inglés y de una dama andaluza.

Trabajó como secretario de redacción del Diario de Barcelona, ​​y le sirvió para profesionalizarse como escritor, ya través de sus escritos, infiltrar ideas modernistas a la burguesía. En 1893 fue importante por dos episodios. Le nombraron miembro numerario de la Academia de Buenas Letras de Barcelona, ​​y presenció el atentado de la Bomba del Liceu, un episodio que produjo un cambio en su concepción del comportamiento humano.

En su vertiente personal, Joan Maragall era un hombre de raíces religiosas y con una fuerte implicación política. Después de vivir diferentes episodios negros de la historia de España, los desastres coloniales, los Hechos del Cu-Cut, la Semana Trágica y la consecuente ejecución del pedagogo y líder de la Escuela Moderna Francesc Ferrer i Guardia, etc., Joan Maragall , a pesar de no pertenecer a ningún partido político, en sus poemas y textos empezó a promover el ”iberismo”, basado en la idea de construir una Federación Ibérica entre las distintas patrias o lenguas naturales (Portugal, Castilla, País Vasco y Cataluña ) como única vía posible por un mejor entendimiento entre naciones libres. No tuvo partidarios ni en Portugal ni en España.

Joan Maragall murió en 1911 a la edad de 51 años a causa de una extraña enfermedad y fue enterrado en este panteón hecho construir por su mujer, Clara Noble, y donde también está enterrada. Ella tenía la tumba familiar también en este cementerio, ya que provenía de una familia acomodada de comerciantes de Jerez, quienes se dedicaban a la exportación de vino y botas de vino a Escocia. Joan Maragall ha pasado a ser Català Il·lustre por el Ayuntamiento de Barcelona y cada año, en el mes de febrero, se celebra en este panteón la festividad del Ametller Florit, donde se recuerda su figura y su obra al lado del almendro. Éste fue plantado por un grupo de seguidores suyo llamado “La Veu” y la Peña Solé de Sant Martí de Provençals, movidos por un artículo del escritor Carles Soldevila en 1923 que decía echar de menos uno en su tumba, haciendo referencia en su poema homónimo. Normalmente, este acto le acompaña también Pasqual Maragall, nieto del poeta y quien fue presidente de la Generalitat de Cataluña entre los años 2003 y 2006.

 

 

 

14. Familia Cros_panteón 8 St. Gervasi P.

El titular original de este panteón fue Amadeu Cros, un empresario catalán con raíces francesas. Su abuelo, Francisco Cros, había introducido el método de la cámara de plomo en la producción de ácido sulfúrico. Amadeu Cros trasladó la empresa familiar de Sants a Badalona, ​​y pasó de producir productos químicos para la industria a producir abonos. A partir de ahí, la empresa se expandió por todo el estado y en 1904 ya se convirtió en una SA por su gran crecimiento.

Según lo que se dice en Badalona, ​​Amadeu Cros murió sin descendencia y dejó su legado inmueble al Ayuntamiento de la ciudad con la condición de que se destinara a usos sociales.

El relevante panteón de la familia Cros fue realizado en 1894 por el reconocido arquitecto Joan Baptista Pons i Trabal, arquitecto barcelonés de estilo ecléctico con influencias del modernismo. Fue el arquitecto municipal de las ciudades de Barcelona, ​​Badalona y la Garriga, profesor catedrático de carpintería en la Escuela de Bellas Artes y también trabajó para familias que querían una residencia particular con distinción, como por ejemplo Pia Batlló (c/ Consejo de Ciento 305), de la segunda generación de los Batlló. Del despacho de Pons y Trabal salieron arquitectos de la talla de Domènec y Sugrañés, quien fue un gran colaborador de Antoni Gaudí en obras como la Casa Milà o la Torre Bellesguard, y quien le sucedió después de su fallecido como arquitecto de la Sagrada Familia durante los siguientes 10 años.

En el panteón destaca una escultura realizada por el prestigioso escultor Venanci Vallmitjana, quien junto a su hermano Agapit, fueron renovadores de la escultura catalana de finales del siglo XIX y principios del XX. La imagen representa una Inmaculada Concepción. María está representada como una joven, coronada, compungida con la mirada baja. A sus pies aparece una serpiente, símbolo del mal, que María pisa. También cabe destacar el gran trabajo de forja que envuelve la sepultura como si de una planta trepadora se tratara y donde también están grabados los nombres de otros familiares enterrados aquí. De nuevo está presente la planta de la adormidera, símbolo del sueño eterno.

 

 

 

15. Dolors Lleonart i Casanovas_tumba 34 Sta Magdalena

Dolors Lleonart, hija de una familia de médicos de larga tradición, fue la primera doctora de la vila de Gràcia, que fue nombrada “Médico honorario”. Posteriormente, ante el talento que tenía para la medicina, su padre le abrió una consulta en la Calle Ferran, la calle de mayor lujo de la época. Posteriormente, se trasladó al Paseo de Gràcia, donde siguió ejerciendo la profesión hasta poco antes de su muerte.

Murió en 1936 y fue enterrada en la tumba familiar. Años después, se le ha dedicado una calle en su honor en el barrio de Gràcia por ser una médica pionera.

 

 

 

16. Xavier Montsalvatge i Bassols_nicho 51 Sta Eulàlia

Xavier Montsalvatge fue un reconocido compositor nacido en Girona en 1912, que estudió violín en la Escuela Municipal de Música de Barcelona, ​​y que más tarde se decantó definitivamente por la composición. También era conocido como crítico musical en el diario barcelonés El Matí, del que fue el director desde 1968 a 1975.

En 1983 se le entregó la Cruz de Sant Jordi por su extensa obra musical con la que había conseguido una gran proyección internacional, convirtiéndose en una referencia de la música contemporánea.

Montsalvatge murió en 2002 a la edad de 90 años y fue enterrado en el nicho familiar.

 

 

 

 

17. Elena Francis_panteón 4 Meseta Superior

Este panteón lo adquirió Josep Fradera, miembro de una familia acomodada catalana y propietarios de la cementera Fradera, fundada a finales del siglo XIX en Sitges.

Josep Fradera se casó con Francesca Bes i Calvet, que es recordada por ser la ideóloga del “Consultorio para la mujer Elena Francis”, el programa radiofónico más famoso de toda la historia de las ondas españolas. El programa empezó a emitirse desde Radio Barcelona para toda España en 1947 y se alargó hasta bien entrada la democracia, en 1984. A lo largo de estos 37 años, varias locutoras famosas dieron voz a una tal Elena Francis, una mujer inexistente que acabó convirtiéndose en una especie de “gurú” espiritual para varias generaciones de mujeres españolas, pese a que había empezado dando consejos de belleza para propaganda de la línea de cosmética y del instituto de belleza femenina de la calle Pelayo de Barcelona que llevaba su nombre.

Francesca Bes tuvo la idea, a partir de otros ejemplos empresariales en Francia y EE.UU., de hacer un programa de radio que sirviera para hacer publicidad de su marca, pero la idea fue mucho más allá que en otros países, probablemente por el contexto social y político que se vivía, donde las mujeres no tenían otro lugar al que ir para pedir consejos y ayuda.

Francesca Bes murió en 1985 y fue enterrada junto con su marido Josep Fradera en este monumental panteón que mandó construir el propietario original Lorenzo Oliver Soler, quien fue un indiano de origen mallorquín que hizo fortunas en México. 

 

 

18. Elena D’Angri_panteón 1 Meseta Superior

Elena de Angri es considerada una de las mejores cantantes de ópera europeas del siglo XIX, la cual fue muy conocida en Barcelona, ​​aunque su nombre no ha trascendido a día de hoy.

D'Angri era de origen italiano, pero nació en 1821 en la isla de Corfú, Grecia. Desde muy joven, ya estudió música en diferentes ciudades italianas, Florencia, Nápoles y en La Toscana, concretamente en la Ópera de Lucca (el actual Teatro Communale del Giglio). Al poco tiempo, donde realmente se hizo un nombre fue en Milán cuando con sólo 20 años actuó en el teatro Scala de Milán. Fue tan brillante que incluso el Emperador Ferdinand de Viena la nombró “cantante di camera” en la corte imperial. D’Angri se convirtió con una mezzosoprano muy reconocida.

Su proyección le hizo cantar en la mayoría de los mejores teatros operísticos de Europa y posteriormente también de Estados Unidos, concretamente en Nueva York, en la “New York Academy of Musics”.

En Barcelona también actuó, en el Gran Teatre del Liceu, ya cuando estaba a finales de su carrera musical, y fue en la ciudad condal donde se acabó retirando, a la edad de 40 años. Aquí se instaló y vivió el resto de su vida junto a su marido, el pianista y compositor tarraconense Pere Abella, quien destacó por dirigir varias óperas en el Gran Teatre del Liceu.

En 1886 Elena d’Angri murió en Barcelona. Desgraciadamente, no existe ninguna grabación de sus óperas, ya que los primeros documentos sonoros se realizaron a finales del siglo XIX. Fue enterrada, junto a su marido, del que se conserva su retrato en el interior del panteón que se hizo construir en 1882 en lo alto del cementerio. En 2015 Cementerios de Barcelona lo rehabilitó por su valor patrimonial.

 

 

 

18bis – Claudia Alsina_tumba 3 , Meseta Superior

Claudi Alsina i Bonafont, nacido en 1859, fue un contratista y maestro de obras, el cual es recordado por colaborar con algunas de las obras más importantes de Antoni Gaudí.

Antoni Gaudí, para poder desarrollar su variada obra arquitectónica, tuvo que reunir a un conjunto de los mejores colaboradores, arquitectos, escultores, pintores, y también artesanos, desde contratistas hasta decoradores, fundidores, carpinteros, etc. Bajo la atenta mirada de Gaudí, a todos sus colaboradores les permitía desarrollar su propia capacidad creativa, y Claudi Alsina destacaba como Maestro de Obras. Él fue, por ejemplo, el encargado de suplir a Gaudí cuando no podía asistir a las visitas de obras de la Sagrada Familia. Antes también había participado en la construcción de la Casa Vicens, el primer proyecto importante de Antoni Gaudí.

Claudi Alsina murió en 1934 y fue enterrado en la tumba familiar de Antoni Soler i Padrós, titular original, y Josefa Gorchs y Jou.

 

19. Capilla

La Capilla del cementerio se construyó en el mismo año que el recinto funerario y fue ubicada en lo más alto, desde donde se tienen unas vistas magníficas de la ciudad de Barcelona. Los documentos indican que fue construida por Pere Falqués, arquitecto municipal de BCN, pero otros dicen que fue Gabriel Marimón.

El edificio es de planta redonda y de estilo neoclásico con ciertas reminiscencias a una de las obras primordiales de la arquitectura del renacimiento italiano, el Tempietto in Montorio de Bramante de Roma. Es la culminación de la vía central y estructural del cementerio, y el punto final de la escalinata y del Vía Crucis que encontramos en el suelo con mosaicos.

Desde aquí, todo el mundo que se oriente mirando a la ciudad de Barcelona, ​​en la parte derecha se puede ver el pincho de la Torre Bellesguard, antiguo palacio del rey Martí el Humano, del que sólo quedaban dos torres medievales que Antoni Gaudí empezó a reformar en 1900. Cabe destacar que el camino hacia el cementerio de Sant Gervasi pasaba justo por debajo de las dos torres, así que, para conservarlas, Gaudí tuvo que desviar el camino hacia otro torrente. Sin embargo, en períodos de lluvia, el agua bajaba con mucha fuerza, y para garantizar el paso de las personas, Gaudí tuvo que diseñar el conocido viaducto de Bellesguard. A partir de material hallado en la misma zona, construyó un viaducto formado por diez columnas en forma de patas de elefante, muy similares a las del Parc Güell. Actualmente, se puede ver justo enfrente de la Torre Bellesguard gracias a la restauración realizada en el año 2006.

 

 

 

20. Juan Barbier-Bergeron i Retouret_panteón 9 Meseta Superior

El panteón número 9 fue hecho originalmente por Juan Barbier-Bergeron, quien fue un dentista muy reconocido en el mundo de la odontología, porque fue pionero en España en el campo de la anestesia. Murió en 1898 y fue enterrado en este panteón junto a sus familiares. Aquí cabe destacar un elemento común también en otras tumbas, que son las patas de león que soportan el monumento. El león es un animal visto como el depositario sagrado del conocimiento, y en el mundo clásico era muy utilizado como defensor de templos, fuentes y puertas de acceso, de ahí que sea fácil de ver en construcciones clásicas o neoclásicas, como es en este caso.

Posteriormente, el panteón fue adquirido por Pedro Esteban Altirriba, reconocido doctor en ingeniería industrial por la UPC.

El panteón 2, justo detrás de éste, también pertenecía a Juan Barbier-Bergeron y a su familia.

 

 

 

21. Família Vilaró i Jacint Torres i Reyató_panteón 5 Sta Magdalena

Este bonito panteón lo encargó Pascual Vilaró i Piera, titular original y quien fue pintor y posteriormente fabricante de tejidos de algodón, en los que aplicaba dibujos. Con su hermano abrieron una fábrica en la C/ Sant Pau, la cual se amplió rápidamente gracias al éxito de sus dibujos estampados. La Junta de Comercio de Barcelona le nombró primer profesor de dibujo de tejidos de la Academia San Francisco. Sin embargo, la conflictividad social hizo que decidieran traspasar las fábricas y dedicarse exclusivamente al comercio y a la importación de algodón y madera, al tiempo que compraban acciones de distintas sociedades.

Pasqual Vilaró murió en 1870 y fue enterrado en este panteón, uno de los más relevantes del cementerio. Éste es obra de Joaquim Bassegoda i Amigó, arquitecto modernista reconocido por realizar muchas obras en Barcelona, ​​entre ellas las Casas Rocamora ubicadas en el Paseo de Gracia con Casp.

La estructura robusta con forma trapezoidal recuerda a los templos egipcios. La cultura egipcia siempre está presente por el gran culto a la muerte que tuvieron y por la creencia en la vida después de la muerte. El panteón destaca por sus formas, tanto de la puerta, flanqueada por dos calaveras, como de las vidrieras, éstas siguiendo las líneas del arco ojival formado en la fachada frontal y que se repiten en los otros tres lados. Las vidrieras contienen el Crismón de Cristo y las letras Alfa y Omega, la primera y última letra del alfabeto griego, simbología recurrente para indicar el inicio y el final del ciclo de la vida. La coronación tiene una decoración con estrellas de ocho puntas, un símbolo que forma parte de la geometría sagrada. Puede llamarse la estrella de Salomón y es símbolo de buenos augurios, pero también es habitual en la cultura islámica y representa el paraíso.

Años después, concretamente en 1926 se enterró aquí a un poeta barcelonés muy reconocido, Jacint Torres Reyató, quien también era forjador y maestro de obras. Jacint Torres era un asiduo participante de los certámenes de poesía de toda Cataluña con poesía narrativa y lírica, y en 1890 logró ser Mestre en Gai Saber en los Juegos Florales de Barcelona, ​​de los que fue mantenedor en 5 ocasiones más.

El panteón 4 de justo enfrente era propiedad del hermano de Pascual Vilaró, Vicenç Vilaró.

 

 

 

22. Manuel Henrich i Girona_panteón 6 Sta Magdalena

Manuel Henrich fue un industrial y político barcelonés. Se dedicaba a la imprenta, y llegó a ser director de diferentes periódicos como La Crónica de Cataluña o La Publicidad.

Su vertiente política empezó como miembro de la Diputación de Barcelona y posteriormente como diputado por Figueres por el Partido Liberal. Manuel Henrich fue Alcalde de Barcelona entre 1893 y 1894, después de suceder a Camil Fabra, marqués de Alella.

Manuel Henrich murió en Caldes de Montbui en 1925 y sus restos fueron trasladados a este panteón en 1931. El panteón era originalmente propiedad de las familias Geli y Crehuet, familias burguesas de destacados médicos, cirujanos y abogados propietarios de diferentes fincas de Barcelona. Cabe destacar la puerta de entrada al espacio anterior al panteón, donde figuran dos anclas, y la barandilla que le rodea formada por un encadenado, seguramente representativo de los negocios familiares y su vinculación con el comercio marítimo.

 

 

 

 

23. Pedro Rodríguez Cervera_panteón 10 St Aleix

Pedro Rodríguez está considerado uno de los maestros de la alta costura española del siglo XX.

Nacido en Valencia en 1895, se trasladó con su familia a Barcelona de muy joven, donde se casó con Anna Maria Marià, con la que abrió una casa de costura en 1919, ubicada en la c/ Consell de Cent, 332. No fue hasta 1929 que con la Exposición Internacional de Barcelona pudo maravillar al público con sus propuestas de estilo art decó. Desde ese momento empezó su gran éxito, y ubicó la tienda en el Passeig de Gràcia. Sin embargo, la Guerra Civil hizo que tuviera que emigrar a París, pero le sirvió para poder inspirarse de la moda francesa. Una vez terminada la guerra, regresó a Barcelona y abrió dos tiendas en otros dos puntos geográficos más principales de la moda del momento en todo el estado, en San Sebastián y en Madrid.

La llegada del Pret-a-porter durante los años 60 significó el inicio del declive de la alta costura, ya que tenía grandes ventajas, eran precios más baratos y podías llevarte la ropa inmediatamente, sin tener que pasar las tres pruebas que la alta costura exigía. Sin embargo, la tienda de Barcelona de Pedro Rodríguez no cerró hasta el año 1979, 60 años después de su apertura.

El Museo del Textil y de Indumentaria de Barcelona conserva el conjunto más importante del mundo en trajes y complementos que Pedro Rodríguez dio, previa una selección que realizó él mismo. Este conjunto forma parte del Patrimonio Cultural Catalán y del Patrimonio Histórico Español.

Pedro Rodríguez murió en 1990 a la edad de 94 años y fue enterrado en el panteón que mandó a construir y donde reposa también su esposa y descendientes.

 

 

 

24. Margarita Rivière i Martí_panteón 11 bis St Aleix

Margarita Rivière fue una de las primeras mujeres en pisar una redacción, a principios de los años 70, y desde entonces trabajó en los principales diarios de la ciudad: El Periódico, La Vanguardia, El País y El Correo. Ha sido una prolífica ensayista, autora de una treintena de libros de todos los géneros. También trabajó en la radio y en la televisión, siendo directora de la Agencia Efe. Fue la encargada de escribir los guiones para las ceremonias de apertura y clausura de los Juegos Olímpicos de Barcelona.

Los temas que trataba estaban relacionados principalmente con el análisis de la cultura, la comunicación contemporánea y los fenómenos de masa, como la moda. Margarita Revière era doctora en sociología, y como gran feminista, escribió libros, junto a Santiago Dexeus, sobre temas como la menstruación y la vejez que han marcado a toda una generación de mujeres.

Entre muchos reconocimientos, fue galardonada en 2007 con el Premio Trayectoria Europeísta y en 2010 con el Premio a la trayectoria periodística de la Asociación de Mujeres Periodistas de Cataluña.

Margarita Rivière murió en 2015 a la edad de 70 años a causa de una enfermedad pulmonar y fue enterrada en el panteón de la familia de su marido, Jorge de Cominges Trias, crítico de cine, redactor y novelista.

 

 

 

25. Enric Clarasó i Daudí_nicho 279 St Joan

Enric Clarasó fue uno de los escultores modernistas más destacados de finales del siglo XIX y principios del XX.

Nacido en Sant Feliu del Racó (Castellar del Vallès) en 1857, era hijo de una familia de menestrales originaria de Reus. Cuando tenía sólo 2 años se trasladaron todos a Barcelona. Clarasó estudió en diferentes escuelas hasta que entró de aprendizaje en el taller del escultor Joan Roig i Solé, persona que tuvo una gran influencia sobre él. También estudió dibujo y modelado en la Lonja y el Círculo de Acuarelistas, donde se hizo amigo de Santiago Rusiñol y de Ramon Cases, que se convirtieron en otros precursores del modernismo catalán y juntos hicieron varias exposiciones que posteriormente le dieron un gran renombre.

Enric Clarasó tuvo una etapa en la que concentró su trabajo en realizar diversas obras funerarias, algunas de las cuales destacan en el cementerio de Montjuïc. Hombre de fuertes convicciones religiosas, en 1900 ganó la medalla de oro en la Exposición Internacional de París con la escultura funeraria llamada Memento Homo, que se puede visitar en el cementerio de Montjuïc. También tiene obras funerarias en el cementerio de Zaragoza.

Enric Clarasó murió en 1941 en Barcelona y fue enterrado en el nicho de su propiedad, donde destaca una lápida de aires modernistas con el nombre Clarasó.

 

 

 

25 Bis- Cèsar Martinell i Brunet_nicho 93, Sta. Tecla

César Martinell fue un arquitecto a caballo del Modernismo y el Novecentismo que destacó sobre todo en la construcción de cooperativas vinícolas.

César Martinell i Brunet nació en Valls en 1888 dentro de una familia de tintoreros y maestros de obras, lo que le influyó decisivamente en su carrera arquitectónica. Discípulo de arquitectos como Lluís Domènech i Montaner o August Font, ambos enterrados también en este cementerio, compañero de dibujo de Joan Miró en la Escuela de Francesc de Assís Galí i Fabra y miembro del círculo de Antoni Gaudí, recibió una formación privilegiada que le permitió ser un arquitecto muy prolífico, sobre todo en la arquitectura industrial.

Enseguida fue nombrado arquitecto municipal de Valls, desde donde construyó la Biblioteca Popular de Valls, objetivo compartido con Eugeni d'Ors. Años después y una vez instalado en Barcelona, ​​lo designaron decano del Colegio de Arquitectos de Barcelona y profesor en la Escuela de Artes y Oficios de Barcelona.

Su extensa obra arquitectónica se centró en las cooperativas vinícolas, conocidas también como “catedrales del vino”, apoyadas por la Mancomunitat de Catalunya, la cual impulsaba el cooperativismo y la obra pública donde destacan diferentes bodegas como la de Cornudella de Montsant, el de Falset, Nulles, Barberà de la Conca, Roquefort de Queralt, Gandesa, Sant Cugat, Pinell de Brai y otros. Una característica de sus bodegas era el arco parabólico de ladrillo y la bóveda catalana, influencias de Gaudí, en cuanto a las soluciones espaciales, y de Domènech i Montaner en cuanto a las formas y materiales, los cuales eran económicos y locales. Logró modernizar la producción agraria adaptándose a los avances tecnológicos y a las nuevas necesidades sociales y mercantiles.

Además, fue historiador del arte, investigador y divulgador, perteneciente a la intelectualidad catalana que también quería culturizar al país con el apoyo imprescindible de la Mancomunitat de Cataluña.

 

26. Lluís Domenech i Montaner_nicho 240 St Pere

Lluís Domènech i Montaner fue un reconocido arquitecto, historiador y político catalán. Nacido en 1850 en Barcelona, ​​hijo de un editor y encuadernador y de familia acomodada, estudió ciencias fisicomatemáticas y se licenció más tarde en arquitectura en Barcelona.

Principalmente, es recordado por su vertiente arquitectónica tan importante sobre todo en Barcelona, ​​donde proyectó edificios que se han convertido en Patrimonio de la Humanidad, como son el Palau de la Música y el Hospital de Sant Pau. Además, también diseñó otros edificios no tan conocidos internacionalmente, pero que son muy relevantes, como por ejemplo la Casa Lleó Morera y la Casa Fuster, ubicadas en el Passeig de Gràcia, o la Torre Simón, su primera obra realizada en 1878 y ubicada en el barrio de Gràcia por encargo de Francesc Simón, un importante editor de la época y fundador de la Editorial Montaner i Simón. Domènech i Montaner se convirtió, así, en uno de los principales protagonistas del Modernismo catalán.

Además, tuvo una importante labor como docente, que duró 45 años, y tuvo una gran influencia sobre el modernismo en Cataluña y sobre sus principales representantes, como fueron Antoni Gaudí, Josep Puig i Cadafalch o Josep Maria Jujol.

Domènech i Montaner tuvo una vertiente política también destacable, dentro del catalanismo conservador. Fue diputado en el Congreso por el partido de la Lliga Regionalista, de la que fue también el presidente. Más tarde fundó la Unión Catalanista, donde Enric Prat de la Riba, futuro presidente de la Mancomunitat de Cataluña, era el secretario, y en ese mismo año 1892 presidió la asamblea que redactó las Bases de Manresa, documento que ponía los cimientos para la devolución de las constituciones catalanas.

Por último, después de las desavenencias con Francesc Cambó, dirigente de la Lliga que tenía un papel destacado en España y que era muy cercano a Alfonso XIII, se dedicó a la investigación arqueológica y a la historia. Todo ello le llevó a ser presidente del Ateneu Barcelonès tres veces, a ser el presidente de los Jocs Florals, miembro de la Real Academia Catalana de Bellas Artes de Sant Jordi y también de la Academia de Buenas Letras.

Domènech i Montaner murió en 1923 tras sufrir un cáncer de estómago y fue enterrado en este nicho, aunque su voluntad era que lo enterraran en el panteón familiar del cementerio de Canet de Mar, de donde era la familia de su mujer. En este panteón de Canet de Mar, hecho por sí mismo, ya estaba enterrada la mujer y uno de sus hijos que murió de pequeño. Sin embargo, el contexto político marcado por la dictadura del general Primo de Rivera, no lo permitió, al considerar que el traslado de una destacada personalidad catalanista provocaría manifestaciones y reivindicaciones políticas. Pasado muchos años, Lluís Domènech i Torres, su nieto, y otros familiares también se han enterrado en esta sepultura, como se ve en las inscripciones.

 

 

 

27. Xavier Turull i Creixell_nicho 56 St Pere

Xavier Turull fue un reconocido violinista y compositor barcelonés.

Nacido en 1922, e hijo de Xavier Turull y Ventosa, un reconocido arquitecto noucentista, estudió en la Academia de Música de Barcelona, ​​siendo discípulo de grandes músicos como Pau Casals. A lo largo de su vida, compaginó tareas como pedagogo, compositor e intérprete.

Su carrera pedagógica la empezó en Sudamérica, en las universidades de música de Colombia y Argentina. Al regresar a Barcelona, ​​consiguió la cátedra de violín en el Conservatorio de Música de Barcelona, ​​convirtiéndose también en el director durante 10 años, de 1972 a 1982, y posteriormente también fue miembro del Consejo de Enseñanza de la Generalitat de Catalunya. Xavier Turull destacaba en esta vertiente pedagoga y también impartía cursos magistrales de interpretación en diferentes ciudades europeas.

Murió en el 2000 en Barcelona, ​​a la edad de 77 años, y fue enterrado en el nicho familiar. Su hijo ha seguido los pasos de su padre y actualmente es el percusionista del popular grupo barcelonés "Ojos de Brujo".

 

 

 

28. Joan Cortada i Sala_nicho 11 St. Pere

Joan Cortada es recordado por muchos por su obra cantada “Il regio imeneo”, dedicada a la boda de Isabell II y Francisco de Asís de Borbón, que con música de Marià Obiols fue la encargada de inaugurar el año 1846 el Gran Teatro del Liceo de Barcelona.

Joan Cortada, nacido en Barcelona en 1805, fue un destacado novelista, dentro del movimiento del romanticismo, y uno de los primeros escritores en tratar los temas catalanes en el ámbito de la novela histórica en castellano. Una de sus obras más destacadas fue “Cataluña y los catalanes” (1860), donde defiende la actuación histórica de los catalanes, y donde por primera vez es presentado el regionalismo como valor político. Además, fue periodista, colaboró ​​en diferentes diarios, como el Diario de Barcelona o El Telégrafo, e historiador, siendo profesor de historia en la UB y miembro de la Academia de la Historia de Madrid.

Joan Cortada murió en 1868 en Sant Gervasi de Cassoles y fue enterrado en el nicho familiar.

 

 

 

29. August Font i Carreras_nicho 5 St. Pere

August Font, nacido en Barcelona en 1846, fue un arquitecto muy reconocido.

Fue uno de los alumnos aventajados de Elies Rogent, quien fue el primer arquitecto romántico catalán y uno de los padres de la escuela de arquitectura catalana que inició el camino hacia el Modernismo, siendo profesor también de Antoni Gaudí i Domènech i Montaner. Junto a Elies Rogent, August Font intervino en el proyecto de la Universidad de Barcelona, ​​la restauración de la catedral de Tarragona y participó también en la de Girona.

August Font tiene un gran conjunto de obras arquitectónicas, de las que cabe destacar la Plaza de toros de Las Arenas (1900), el Palacio de las Bellas Artes de Barcelona, ​​que fue derribado en 1942, y la finalización de la fachada gótica de la Catedral de Barcelona (1913), donde muestra su gran habilidad por la arquitectura neogótica.

Al mismo tiempo, August Font era docente en la Academia de Bellas Artes de Barcelona y catedrático de la Escuela de Arquitectura de Barcelona.

De August Font también tenemos conocimiento de obras funerarias, como el majestuoso panteón de la familia Mumbrú situado en el cementerio de Sarrià.

August Font murió en Barcelona en 1924 a la edad de 77 años y fue enterrado en el nicho familiar.

 

 

 

29 Bis- Josep Balasch i Solà_ nicho 67 St. Pau

La sepultura fue adquirida en 1863 por Josep Balasch i Solà, un hacendado que se convirtió en cinco ocasiones en alcalde de la Vila de Gràcia. La trayectoria de Josep Balasch es recordada por ser el alcalde que adjudicó las obras de la Torre del Reloj al arquitecto del municipio Antoni Rovira i Trias. El también llamado Campanario de Gracia, es uno de los símbolos más representativos de la Vila de Gràcia.

No es de extrañar que los de Gràcia se enterraran en el cementerio de Sant Gervasi, ya que no prosperó su propio cementerio por la proximidad con los núcleos urbanos del entorno y porque el Cementerio General de Barcelona, ​​actualmente el del Poblenou, estaba demasiado lejos. Es por esta razón que otros alcaldes de Gràcia tienen sepultura aquí, como son Francesc Derch i Alió, el líder de la Revuelta de las Quintas de 1870 (Illa St. Pere, nicho preferente 17, piso 2), y Feliu Martí i Urpí, quien en 1882 restauró la Torre del Reloj después de la sublevación en contra de la Revuelta de las Quintas (Illa St. Aleix, nicho 37, piso 1).

En 1889 colocaron los restos de Josep Balasch y en 1910 los de su hija Teresa Balasch i Daura, tal y como indica la lápida del nicho.

 

josep balasch

 

30. Ricardo Ramos Cordero_panteón 1A St Francesc Xavier

Ricardo Ramos fue uno de los navieros más importantes de Barcelona del siglo XIX. Era hijo de Ramón Alonso Ramos, fundador de Casa Ramos, originaria de Galicia. Al morir, Ricardo Ramos pasó a ser el gerente de la compañía (1888) y la convirtió en la tercera de España de su sector.

Paralelamente a su negocio, Ricardo Ramos fue político durante la Restauración Borbónica. Ramos fue diputado por Lleida en las elecciones generales de 1914 y 1916 por el Partido Conservador, y senador de 1918 a 1923.

A Ricardo Ramos también se le recuerda por su vivienda plurifamiliar que aún hoy en día destaca en la Plaza Lesseps de Barcelona. Un edificio hecho por el arquitecto Jaume Torres de estilo noucentista, pero de influencias modernistas, situado frente a la Iglesia de San José, popularmente conocida como "los josepets".

El panteón Ramos, realizado también por el arquitecto Jaume Torres i Grau, conocido sobre todo por hacer el edificio de Correos de Via Laietana, es una de las sepulturas más curiosas del cementerio, ubicada en uno de los ángulos del muro perimetral del recinto, y con mayor capacidad, con 14 departamentos. Es un claro ejemplo de la arquitectura funeraria del siglo XIX con una rica simbología religiosa. En la parte frontal destaca el nombre de la familia sobre una planta de palmera, símbolo de origen egipcio que representa el triunfo de la vida sobre la muerte. A ambos lados figuran las letras griegas Alfa y Omega, símbolo del inicio y final de la vida, y justo encima y presidiendo el panteón aparece un reloj de arena alado, también conocido como “Tempus Fugit”, un símbolo funerario muy recurrente para expresar la brevedad de la vida. Las columnas de la entrada tienen unos capiteles en los que se representan en cuatro caras el paso del tiempo, desde la infancia hasta la muerte. Una gran puerta muy ornamentada da acceso al interior del panteón, y en la parte superior un Crismón de Cristo la preside.

 

 

 

Otros personajes relevantes

 

Ramón d’Abadal i Calderó_panteón 3 St. Francesc Xavier

Ramón de Abadal, nacido en Vic en 1862, fue un reconocido abogado y político de la Lliga Regionalista, convirtiéndose en concejal de Barcelona, ​​senador por la Diputación de Barcelona y presidente de la Asamblea de Parlamentarios. Pasada la dictadura de Primo de Rivera, durante la cual fue apartado de los cargos, fue diputado durante la Segunda República, y también diputado en el Parlament de Catalunya por la Lliga.

Paralelamente en el mundo de la política, también fue Presidente del Ataneu Barcelonès, decano del Colegio de Abogados, hasta que Primo de Rivera le destituyó y encarceló.

Al estallar la guerra, se exilió a Francia e Italia y una vez terminada la guerra regresó a Barcelona, ​​pero quedó apartado de la vida política.

Murió en 1945 en Rupià (Girona) y fue enterrado en el panteón de su propiedad.

 

Faimlia Pantaleoni_tumba 13, St. Francesc Xavier

La familia Pantaleoni es recordada por el imperio de moda que construyeron en Barcelona y que duró 4 generaciones.

Miguel Pantaleoni Giusti, originario de Luca, Italia, llegó a Barcelona en 1865 para abrir una pequeña tienda de confección de ropa, la primera de todo el estado. El éxito no tardó en llegar y con sólo un año, amplió el negocio y sus dos hermanos se incorporaron, creando la prestigiosa marca “Pantaleoni Hermanos”. Rápidamente, abrieron diferentes tiendas en puntos estratégicos de la ciudad, Calle Escudellers, La Rambla, Calle Ferran, que era la calle burguesa de la época. Por último, viendo la proyección que tenía el Eixample respecto a Ciutat Vella, trasladó la tienda de la Rambla para situarla más arriba, junto a Canaletes. Allí es donde inauguró la conocida tienda Modelo, convirtiéndose con el buque insignia de la marca, que ha llegado hasta nuestros tiempos. Por desavenencias familiares, a partir del año 2006 fueron cerrando paulatinamente todos sus negocios.

Miguel Pantaleoni murió en 1923 a la edad de 82 años y fue enterrado en la tumba de su propiedad.

 

Darío de Regoyos Valdés_133, 1er piso, Sant Francesc Xavier

Pintor asturiano nacido en 1857, destacó por su estilo impresionista, con un importante capítulo dedicado a la visión de la “España negra”, pinturas tremendistas de finales del s. XIX y principios del XX.

De joven vivió en Bruselas, invitado por sus amigos músicos Isaac Albéniz y Enrique Fernández Arbós, y se matriculó en la Escuela de Bellas Artes. Fue allí donde destacó como impulsor del Arte Moderno en Bélgica.

En su madurez viajaba a menudo al Estado español, donde pintó paisajes naturales, hacía exposiciones, como en la Sala Parés en 1905, o en las Galerías Dalmau de Barcelona en 1913, siendo ésta la última.

Falleció el 29 de octubre de 1913 en Barcelona de un cáncer. Varias poblaciones españolas le han dedicado calles, Oviedo, Bilbao, Irún, etc.

Antoni Pérez Moya_nicho 711, piso 4t, Sant Francesc Xavier

Músico, compositor y director coral valenciano, vivía en Barcelona desde pequeño.

Se le recuerda principalmente por la producción musical en obras para corazón y música religiosa. Armonizó también canciones tradicionales catalanas, su versión de El rossinyol es una de las más cantadas.

En su carrera como director de coros destaca la dirección del Orfeó de Sants, donde estuvo 32 años.

Murió en 1964 con 79 años el día de la fiesta de Sant Medir.

 

Albert Ràfols Casamada_nicho 165, pis 5è, Sant Pere

Artista polifacético, fue pintor y poeta destacado. Formó parte del Patronato de la Fundación Joan Miró y fue galardonado con el Premio Nacional de Artes Plásticas.

Murió en 2009 y fue enterrado junto a sus familiares.

 

Joan Rodón i Fabrés_nínxol 24, pis 1r St. Aleix (menció)

Artista de finales del siglo XIX, destacable como escultor de madera policromada y otros materiales, se enmarcaba en el estilo modernista de la época.